martes, 18 de febrero de 2014

Es hora de limpiar la casa.

Ante todo voy a aclarar que yo no soy fanatico de la pelota. Cuando niño era malisimo, de adolescente malo y ahora ni se me ocurre jugar pese a tener un cuerpo cultivado con pesas y ejercicios desde los 9 años.


Tampoco soy cronista deportivo. Mis únicas incursiones en ese terreno fueron como estudiante durante las practicas de producción en el periódico Vanguardia, de Villa Clara, y en el diario, en aquel entonces, Trabajadores, durante los Juegos Olímpicos de Los Ángeles.

Pero vayamos al grano.

Desde hace un tiempo que veo publicaciones en facebook y medios online acerca hechos, decisiones y general deterioro del pasatiempo nacional de los cubanos. El Béisbol. 

Todo va desde la supención de congas en los estadios, para posibilitar la “concentracion" de los jugadores,  indisciplinas increíbles en el terreno que han traído por consecuencias riñas tumultuarias y culminando con la desastrosa presentation  en la Serie del Caribe, a donde llegamos pavoneandonos y salimos trasquilados.

Que esta pasando? Se ha quedado atras el pasatiempo nacional?. En tiempos en que nuevos aires de desarrollo económico y levantamiento de añejas e inexplicables leyes y prohibiciones recorren la Isla, el Béisbol va como el cangrejo, para atrás.

Cuba no gana un torneo internacional de peso desde el Preolímpico de las Américas y la final con Japón en el I Clásico Mundial de Béisbol, ambos torneos en 2006.

La mala racha continuo  con el Mundial de Taipéi de China 2007, la Olimpiada de Beijing y el torneo de Haarlem 2008, el II Clásico 2009, el campeonato Mundial 2011, el Mundial categoría sub-15 2012 y el III Clásico de béisbol
.
Ahora se suman batazos en el terreno. Ya no es el publico emocionado, ahora son los propios atletas.
Donde acaba esto? Perdiendo ante Camerun o Burkina Faso en clasificatorias para unas probables olimpiadas si el Comité Olímpico Internacional se dignara a reconocer el Béisbol entre los deportes privilegiados para participar en su evento?.

Creo que el Béisbol cubano necesita limpieza general, desde arriba hasta abajo.
Comenzar de nuevo con sangre joven ya que los que los que lo dirigen han demostrado que no están aptos para los tiempos que corren.  O es que no tenemos cientos de miles de graduados universitarios en Cultura física que pueden revolucionar forma de seleccionar, entrenar y  estrategia de nuestro mas popular entretenimiento?.

Mano dura con el indisciplinado, que por uno que se va tenemos un millón con iguales o mejores condiciones esperando  para vestir el uniforme.

 Y que vuelvan las congas carajo. Eso le da vida al deporte.